Decir Lunes Santo en Antequera es ver la estampa del Nazareno de la Sangre seguida de nuestra banda de Cornetas y Tambores. Y así ocurrió en el día de ayer. Fiel a su cita nuestra formación realizó el tradicional pasacalles acompañando el Desfile de Armadilla. En torno a las siete de la tarde la banda inició su paso junto al titular antequerano con paso sereno acompasando cada mecida por Calle Calzada, luego Plaza San Sebastián, Calle Infante Don Fernando. El sol se despedía de la ciudad del Torcal mientras nuestra formación echaba mano del maestro Escámez para poner banda sonora al paso del Nazareno.

La banda se gustaba y lo demostraba en cada intervención, después de un año entero de trabajo y de la incorporación de numerosos y nuevos componentes tocaba demostrar el buen hacer de la formación. Las composiciones propias coparon el repertorio, muchas de ellas obras de nuestro actual director Sergio Pastor, quien no pudo acompañarnos en el día de ayer. A su paso por C/ Infante don Fernando el trono transitó sin música como señal de duelo del hermano de la cofradía Paco Villalón, para de nuevo incorporar los sones de nuestra banda justo antes de llegar a la tribuna situada frente al Ayuntamiento de la ciudad.

Multitud de antequeranos acompañaron durante todo el recorrido al Nazareno de la Sangre, en C/ Cantareros muchos miembros de la banda ya mostraban su deseo de llegar a C/ Duranes para vivir otro año más uno de los momentos más emocionantes de la Semana Santa de Antequera. Y así fue, nuestros músicos regalaron seis marchas practicamente ininterrumpidas al Señor de Estudiantes al que acompañábamos. Tanto la banda de Cornetas y Tambores como los hermanacos se resistían a abandonar esta mágica calle que hace florecer los sentimientos más hondos de cualquier cofrade.

Para finalizar y ya en el inteior de San Zoilo, la banda despidió al Nazareno de la Sangre con la marcha ‘Madre’, entre los aplausos y mecidas del trono.

En los rostros de los miembros de la banda se reflejaba la satisfacción del trabajo bien hecho. Después de 22 años, cada Lunes Santo sigue emocionando a nuestra banda.